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martes, 14 de junio de 2011

¿Qué es el alma? por Pedro Magaña

Hemos oído y hablado en repetidas y cotidianas ocasiones sobre el alma, sin tener consciencia de su amplio significado o inconscientemente damos por hecho que lo entendemos.

El alma es el medio por el cual el cuerpo físico tiene conexión con el espíritu y a su vez el espíritu tiene conexión con el cuerpo físico.

El alma genera la atracción y hace perdurable la relación entre la esencia y la presencia a través del amor y es a través del amor que crece.

Es a través del alma que unimos las ideas con los hechos, es el vehículo que nos permite viajar tanto en el mundo visible como en el mundo invisible, tanto en lo que llamamos normal como en lo paranormal.

El alma es el cuerpo neumático que amortigua y suaviza el contacto entre la materia y el espíritu, evitando choques violentos que no podríamos dominar sin este ayudante, por lo cual es de vital importancia nutrirla y engrandecerla, ya que cuanto más grande es, el contacto o conexión con el mundo divino es igual de grande, vasta que recordemos a grandes visionarios y ejemplos de conciencia y presencia como MAHATMA GANDHI, MAHATMA CHANDRA BALA (Dr. Serge Rainaud De La Ferriere), etc.

Todos tenemos un alma. Y aunque por el momento no llegue al grado MAHATMA (alma grande) si podemos entender que es la herramienta que tenemos para adentrarnos en el mundo del espíritu y de esta manera ir develando el gran misterio de la existencia universal.

En el caso de los animales su alma es colectiva y el impulso evolutivo también, hasta lograr con ese impulso universal pasar a ser un humano y de ahí en adelante depender de si mismo, debiendo encontrar por sí solo el siguiente paso evolutivo. Ahora con un alma individual empezará con destellos de ilusiones, de sueños, de visiones, que sin saber le llegarán a través de su alma, hasta descubrirla y utilizarla como trampolín para alcanzar esferas superiores.

El alma se alimenta de emociones que le son inspiradas por el espíritu, el cual le aconseja las trasmita al cuerpo físico, para que a su vez el cuerpo físico se emocione y fuertemente inspirado por el alma realice acciones que correspondan a las aspiraciones de su espíritu, ejecutando así una conexión lineal, casi como si no existiera el alma.

Se dice que una persona no tiene alma cuando sus actos carecen de valores morales, éticos o de conciencia; a los maleantes se les conoce como desalmados, debido a la falta de conexión con su parte más pura que es el espíritu; cualesquier acto tiene valores solo de ida y cuando se devuelve no se entiende que aquella causa se convirtió en efecto. Y claro que es por esta misma razón que poco a poco va cambiando la conciencia al entender que todo daño, robo, ofensa, etc., en realidad es como si nos lo hiciéramos a nosotros mismos.

Usemos nuestra alma para conectarnos con lo superior por medio de la meditación, la poesía, el arte, la contemplación, etc.,  para serenarnos y hacer lo que verdaderamente queremos hacer, sin remordimientos, ya que no  ignorararíamos el efecto que causará nuestra acción.