Meditemos un
momento. Si cierto hombre no
hubiera conocido a cierta mujer, muy atrás en la oscura Edad
de Piedra, vosotros que estáis
ahora leyendo estas líneas no
estaríais ahora aquí. Y si, quizá,
la misma pareja no se hubiera encontrado, los que escribimos estas líneas tampoco estaríamos
aquí.
Y el mismo
hecho de que nosotros, por nuestra parte, escribamos
y de que vosotros leaís por la vuestra, afectará
no solamente nuestras propias vidas, sino que también
tendrá un efecto directo o indirecto, sobre muchas otras personas que viven actualmente o que vivirán en las edades por venir.
Todo pensamiento
generado en nuestra mente, todo acto realizado, tiene
sus resultados directos e indirectos
que se eslabonan coordinadamente en la gran cadena de Causas
y Efectos.
El Kybalión, por Tres Iniciados