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martes, 17 de mayo de 2011

El Cuerpo emocional, Parte 3: ¿Qué es esto que llamamos emociones? Por Elena Moreno

Traducción del inglés al español

Hidden Influences by Charles Stewart
Etimológicamente, la palabra "emoción" es un compuesto de dos palabras en latín, "ex", es decir de ida y "motio" movimiento, sentido o acción. Nuestras emociones son asesores de gran alcance que nos alertan de todo lo que nos está sucediendo a nuestro alrededor y a continuación centran nuestra atención y motivan nuestras acciones.

Estos asesores evalúan la información que les llega a través de nuestros sentidos, así como de fuentes más intuitivas sutiles. La mayor parte del tiempo estamos en un estado neutral, pero cuando algo se detecta como fuera de la energía ordinaria se libera una respuesta a ese estímulo específico. A continuación se telegrafía a nuestra conciencia en lenguaje de sensaciones complejas, que una vida de experiencias nos han programado para interpretar. Cuando siento mariposas en el estómago, yo sé que algo me da miedo y cierro las manos, es un miedo basado en una situación aguda, y siento como si alguien me diera una patada en el estómago u observar la alegría de una novia puede hacerme llorar.
          
Es importante tener en cuenta la diferencia entre los sentimientos, que nacen de la emoción y la intuición. Los sentimientos son por lo general basados en el ego, mientras que la intuición tiene una base más pura. Rara vez la intuición se ve influida por el ego, la autoestima, el valor o la personalidad. La intuición es una sensación mental de saber, que no es compatible con nada que provenga de nuestros cinco sentidos. Los sentimientos se derivan de una vida de experiencias que se han integrado, la intuición no necesariamente. Hay una diferencia muy sutil, pero la experiencia y la observación cuidadosa nos ayudarán a hacer el discernimiento.

Seremos mejor guiados por las señales de las emociones, si las estudiamos. Las alertas o avisos no reconocidos o mal entendidos pueden crear confusión en nuestras vidas. Piensa en las experiencias que has tenido con emociones fuertes ¿Cómo te han obligado ha actuar estos potentes sentimientos?

¿Cómo se expresan las emociones en tu cuerpo? ¿Cómo mariposas, rubor o piel de gallina? Por ejemplo ¿De qué manera sientes el miedo? ¿Cuál es la diferencia en los sentimientos que asociamos con el amor, la pasión y el sexo? ¿Qué sientes cuando tienes que ir al dentista? ¿Cómo te sientes acerca de hacer tu declaración de impuestos? ¿Has tenido alguna vez dificultades para controlar la ira, los celos o venganza?

Identificar experiencias intuitivas. Por ejemplo: sentimientos inusuales de bienestar que no son compatibles con los eventos de tu vida o tal vez sin razón aparente sientes temor de hacer algo o de ver a alguien. Trata de recordar experiencias emocionales e intuitivas que pudieras haber tenido en el último mes. Anota las que tengas en las próximas semanas. Observa ¿Cómo y por qué te obligan a actuar?