twitterfacebookgoogle plus
linkedinrss feedemail

miércoles, 21 de septiembre de 2011

Cuerpo Mental 10: Intuición y Razón por Elena Moreno



Traducción del inglés al español

¿Recuerdas a Pepe Grillo, un personaje de Disney? Los archivos de Disney lo describen como:

"Gran Señor Guardián del conocimiento del bien y el mal, consejero en los momentos de tentación y Guía a través del camino recto y estrecho. Al igual que cualquier conciencia, Pepe Grillo de vez en cuando se retrasa en su trabajo y con frecuencia es ignorado, incluso cuando está cerca. Afortunadamente, Pepe no sería nada si no fuera persistente, y finalmente tiene éxito al regresar a Pinocho de nuevo al camino correcto".


Todos tenemos nuestro propio Pepito Grillo personal y como Pinocho, en los momentos de conflicto podemos quitar esa pequeña criatura de nuestro hombro, pero pronto nos damos cuenta de lo mucho que dependemos de ese amigo persistente que llamamos intuición. Nuestra intuición es algo más que nuestra conciencia, nos mantiene en el camino recto y estrecho. Nuestra intuición es una guía maravillosa que puede darnos ideas, ayudarnos a tomar decisiones, aumentar nuestra creatividad y ver la vida desde una perspectiva diferente.


 Despertar nuestra intuición no es un proceso inmediato, no podemos encender el interruptor y producir conocimiento. Una de las mejores maneras de trabajar con nuestra intuición es en combinación con nuestra mente racional. Todos podemos beneficiarnos de aprender nuevas maneras de desbloquear la creatividad accesando a conocimientos únicos, pero la clave es aprender a desarrollar nuestra mente intuitiva de una manera que nos permita el acceso racional. Mientras que nuestros sentidos puedan darnos la información disponible en nuestro entorno inmediato, no podremos ver lo que no está dentro del rango de visión; si estoy en California, no puedo ver personalmente algo que está sucediendo en Kansas. Sólo puedo estar en un lugar a la vez. Tampoco puedo ver físicamente dentro del corazón y la mente de alguien. Mis sentidos están limitados sólo a lo que está dentro de mi rango espacial de percepción. Es más, mis sentidos no pueden percibir más allá del momento. Ellos no pueden decirme lo que pudo haber ocurrido antes o lo que sucederá después.

La mente intuitiva es diferente porque no está ligada a la realidad objetiva, por lo que no está limitada por el tiempo o el espacio. Puede conocer más allá de las condiciones físicas inmediatas y puede recordar el pasado y el futuro. ¿Por qué? Porque es parte de una realidad que no está sujeta a las mismas condiciones que nuestra realidad relativa. El universo físico es finito, mortal, siempre cambiante y sujeto a condiciones. La realidad subjetiva de la mente no está sujeta a ninguna de las condiciones físicas.


Vamos a ilustrar este punto. Yo había estado trabajando en un proyecto durante varios días. Mi ego se centró totalmente en un enfoque particular que me pareció directo y con mucho estilo. Construí
 por completo mi estructura en torno al concepto. La noche antes de la presentación me desperté en medio de la noche, sintiéndome ansiosa y aprensiva. Traté de ignorar el sentimiento y volver a dormir pero no pude. Al principio pensé que estaba nerviosa por la entrega, pero luego me di cuenta que estaba preocupada por el proyecto en sí. Racionalmente sabía que estaba bien hecho, pero en el fondo yo sentía un problema. Me senté en mi computadora y leí rápidamente el documento, al tiempo que luchaba por verlo con ojos imparciales. Y allí estaba, mi concepto fundamental era incorrecto. Me había aferrado tanto a usar mi metáfora inteligente que había distorsionado el punto de todo el proyecto. En realidad, había perdido el punto. Afortunadamente tuve la oportunidad de hacer las correcciones necesarias antes de la presentación. Después pensé en lo afortunada que fui al no ignorar mis sentimientos aprensivos.

También recuerdo que hace unos años, una mujer joven se trasladó a nuestra comunidad, al mismo tiempo que yo estaba buscando una nueva secretaria. La entrevisté y quedé muy impresionada - gran educación, buen curriculum y una excelente presentación; la candidata perfecta, pero le dije que todavía tenía que entrevistar a otras personas. Incluso después de una segunda entrevista, aunque una parte de mí estaba gritando, "contrata a esta mujer”, también hubo una voz que me advirtió que había un problema. No, no la contraté. Varios meses más tarde me enteré de que había ido a rehabilitación por una adicción a los analgésicos.


Nuestros sentidos son adecuados para juzgar las cosas simples. No debemos depender solamente de nuestros sentidos cuando tomamos decisiones importantes que tienen consecuencias más allá del momento. Siempre es una buena idea obtener tanta información como sea posible, y luego ir más allá del cerebro racional. No pienses demasiado en ello. Déjalo por un tiempo; incluso puedes dormir con eso. De repente "sabrás" sin lugar a dudas, cual es la opción correcta.


Mi vecino se moría por comprar un negocio. Racionalmente, no era una buena decisión de negocios. La propiedad estaba sobrevaluada y las estructuras no estaban en buenas condiciones. Continuó buscando otras opciones más sensatas, pero continuó regresando a la propiedad original. Cuando vino a verme, dijo, "No sé qué hacer; no puedo justificar la compra de este negocio, pero en mis "adentros" sé que es algo bueno”. Mi consejo fue que siguiera su intuición, porque sus sentidos no le podían dar un panorama más completo que su intuición. Creo que él quería que yo le dijera que no lo hiciera, y se sorprendió cuando en vez de eso le dije que las ideas más exitosas sólo tienen sentido después del suceso, cuando tenemos una mejor perspectiva. Más tarde, cuando conectó los puntos pudo ver claramente todas las razones de su éxito, razones que en un principio sólo eran visibles como un persistente sentimiento de sus “adentros”.


La próxima vez que necesites tomar una decisión, intenta lo siguiente:

  1. Recopila tanta información de tus sentidos como sea posible.
  2. A menudo nos apresuramos a tomar decisiones que no necesitan hacerse tan rápidamente o en el momento. Tómate tu tiempo. De hecho, si es posible, deja tu decisión por un lado y no pienses en ella durante un período de 24 horas.
  3. No importa qué tan "rápidamente" debas decidir, siempre hay tiempo para sentirla- aunque sean uno o dos segundos.
  4. Si puedes posponer la decisión 24 horas, hazlo. Duerme pensando en ella y luego observa cómo te sientes al respecto a la mañana siguiente. Pregúntate qué debes hacer y seguramente "sabrás" la respuesta. 
  5. Si estás indecisa, siéntete bien con ambas posibilidades, tal vez signifique que no hay elección "mala" sino que ambas opciones son buenas. Si estás indecisa, pero tienes una sensación negativa sobre la situación en general, probablemente significa que no existe una buena opción. Si estás viendo dos carros y sientes que los dos son buenos, entonces es hora de echar un volado. Por otro lado, si no puedes hacer una elección, pero sientes una sensación de fatalidad en la boca del estómago, puede significar que la selección del carro no es el problema - la verdadera pregunta es si deberías adquirir la pesada deuda al comprar cualquiera de los dos carros. El deseo de tu cuerpo está diciendo: "¡Sí! ¡Sí! ", Pero tu intuición está diciendo: "De ninguna manera!" Entonces ¿A quién le harás caso? pues tu deseo está claramente ligado a las emociones. Yo siempre sigo el consejo de mi intuición sobre mis emociones. ¿Por qué? Pues porque las emociones están al servicio de nuestro ego, mientras que la intuición está al servicio de todo nuestro ser.

Cuanto más ejercites tu intuición, más fuerte será. Si no se utiliza, puede convertirse en una voz más silenciosa, pero suavemente seguirá insistiendo. Recuerda a Pepe Grillo, nunca se rindió. En determinado momento se puede deliberadamente quitar de nuestro hombro esa pequeña criatura, pero la siguiente vez que queramos ignorar nuestra intuición hay que recordar que es una importante compañera. Si nuestra intuición se ha convertido en silencio o tenemos problemas para encontrar nuestra guía interior, establezcamos la intención. Sólo con tener la intención de escuchar la voz el espacio se abrirá para que suceda. Cuanto más usamos nuestra intuición, más fácil será para nosotros accesar a ella, y nuestro entendimiento será más claro y preciso.

Para practicar:
          Buenas lecturas:
  •  Blink: The Power of Thinking Without Thinking un gran libro sobre el pensamiento intuitivo por Malcolm Gladwell
  • Intuition: Its Powers and Perils  de David G. Myers, profesor de psicología en la universidad de la esperanza de Michigan, es una mirada fascinante a la parte científica y espiritual de la intuición.
  • Trata de probar tu intuición. Recuerda, si afloran "sentimientos" que estén emocionalmente cargados, probablemente decidas con la emoción en lugar de la intuición. La intuición pura es justo un claro sentido de saber, sin fundamentos emocionales. Si hay una carga emocional, deja pendiente la decisión hasta que la energía se disipe y te sientas equilibrada y tranquila.
  • Lee el ensayo Dhyana (Meditation)  de Marimar Higgin en el blog de Elena Moreno http://www.empowermentweekly.com de esta semana y trata de lograr la mente clara.
  • Empieza un diario de la intuición. Anota tus ideas intuitivas y ve qué tan exactas resultan ser en la ejecución. Si algo está realmente fuera de lugar, tratar de entender si fallaste en tu interpretación, en la ejecución o simplemente no era una respuesta adecuada.
  • Usa tu intuición para evaluar todas tus acciones tanto las que niegan o afirman la vida. Sólo toma las decisiones que afirman la vida.
  • Cuando necesites una guía especial, haz la pregunta, procura tener una buena noche de sueño y  luego aclara tu mente para que puedas escuchar la respuesta.
  • Alquila la película de Pinocho y pasa una tarde renovando tu amistad con Pepe Grillo.