twitterfacebookgoogle plus
linkedinrss feedemail

martes, 13 de septiembre de 2011

Cuerpo Mental 9: ¿Cómo puedo entrar a la Mente? por Elena Moreno

Traducción del inglés al español
¿Puede alguien tener acceso a la Mente? Sí, por supuesto, pero muchos de nosotros estamos tan conectados con el mundo físico, que nos resulta difícil percibir otra cosa. Algunos de nosotros no estamos conscientes de que tenemos Mente y, por lo tanto, no sabemos cómo usarla. No podemos tener acceso a la Mente a menos que estemos conscientes de ella, controlemos nuestro cuerpo físico, nuestras emociones y enfoquemos nuestro cerebro.
Tenemos que dejar todo movimiento. Estamos siempre en ON - haciendo, planificando, pensando. 

Thomas Merton dijo una vez: "Sólo nuestros proyectos se interponen entre nosotros y Dios". Por supuesto, se está refiriendo a la contaminación de la actividad y estimulación. ¿Por qué le tememos al silencio? ¿Por qué tenemos miedo de no hacer nada? ¿Activamente evitamos nuestro mundo interior? ¿La ética de trabajo occidental nos ha programado para estar siempre produciendo y experimentando? ¿Por qué es tan difícil para nosotros sentarnos en silencio con nosotros mismos? Nos encanta dormir, sobre todo cuando tenemos un sueño muy profundo, sin embargo, a menudo nos resulta difícil ir allí, consciente y consistentemente.

Para tomar conciencia de nuestra Mente, tenemos que bajar el volumen de nuestras preocupaciones diarias y las ocupaciones de nuestra vida y darnos tiempo para las actividades que amplíen nuestro espacio interior. Cuando hacemos esto, comenzamos el proceso de descubrimiento. No es difícil, en realidad, es nuestro estado natural de ser.
"Extenso como el mundo 'externo' es, con todas sus distancias siderales difícilmente aguanta la comparación con las dimensiones, las profundas dimensiones de nuestro ser interior, el cual ni siquiera necesita la amplitud del universo para ser, en sí mismo, casi ilimitado".
- Rainer Maria Rilke

El problema es que hemos desarrollado nuestra realidad física completamente fuera de proporción a nuestra realidad no-física. Externamente, todos buscamos lo mismo. La diferencia está en nuestro mundo interior - lo que sabemos, cómo y qué pensamos. Por ejemplo, todos tenemos manos, pero no todas las manos pueden tocar el piano. Las manos del pianista son manos educadas, sin embargo, se parecen a las manos de cualquiera. Lo mismo puede decirse de nuestra Mente y nuestro Espíritu. Tenemos que educar  nuestro cuerpo físico y nuestro cuerpo emocional, si queremos accesar a nuestras dimensiones espirituales.

¿Cómo? El proceso es simple. Empezamos por decidir que queremos desarrollar nuestro ser interior. Debemos enfocar nuestra energía, aquietarnos, disminuir el volumen de la vida y eliminar las complicaciones innecesarias y las distracciones. Necesitamos dejar de estar tan ocupados que no tengamos tiempo a solas con nosotros mismos. Es esencial que reconozcamos que hay cosas más importantes que el trabajo. Vamos a esforzarnos por eliminar las perturbaciones innecesarias y centrar nuestra atención en ser más conscientes y menos absorbidos por la personalidad. Vamos a limitar los estimulantes y no ver mucha televisión, especialmente programas chatarra. Esto también incluye a los periódicos, radio, Internet, revistas y películas. Vamos a escoger lo que dejamos entrar.

¿Cómo podemos minimizar el ruido en nuestra cabeza?
  • La participación diaria en las disciplinas espirituales como la oración, afirmaciones, yoga, tai chi, chi gong o artes marciales es una excelente fuente para fortalecernos.
  • Sé creativa, dibuja, pinta con los dedos, escribe poesía, canta, baila, cose, cocina, esculpe madera, planta un jardín. Cada día, date tiempo en paz para vaciar tu Mente de estimulación objetiva. Pídele a tu cuerpo que se calme y al cerebro que se aquiete.
  • Dedica tiempo para meditar. Recuerda, si traes la Mente al frente de tu conocimiento consciente, el físico se moverá a la parte de atrás.
  • Por encima de todo, para tener acceso a tu  Espíritu, debes usar tu intuición; entre más la ejercites, más fuerte, más frecuente y precisa se volverá.
  • Cree conscientemente en la infinidad de tu espacio interior.