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martes, 10 de enero de 2012

AMOR 14: Amor Divino por Elena Moreno


Traducción del inglés al español

Antes de que nuestro universo fuese creado, toda la materia, toda la energía, todo lo que existe hoy en día estaban unidos en una sola masa densa insondable. Entonces, el Big Bang ocurrió ... la masa explotó... y nuestro vasto y asombroso Universo fue creado. Hay una memoria compartida de ese original estado de unidad. Cuando nos unimos colectivamente, volvemos a nuestras raíces – El Eden, nuestra comunidad Divina.


Nos conectamos con todo - desde las más bellas hasta las más horribles manifestaciones de la vida. Somos el Universo y el Universo es nosotros. Estamos en Dios y Dios está dentro de cada uno de nosotros. Este sentido de unidad, este Amor inequívoco nos lleva a lo más profundo de nuestra alma y nos abre a las infinitas posibilidades de la vida.

El Amor Divino es espacioso y envolvente, ya que no se trata de nuestro ego. Se trata de toda la naturaleza - de toda la vida. De esta manera, el Amor Divino cambia nuestra percepción de sí mismo, del ser.

No puedo evitar preguntarme: Si la unidad es nuestro estado natural ¿Por qué es tan difícil mantenerse conectado con el Amor Divino? Tal vez es porque nos hemos acostumbrado a estar separados. Nos hemos acostumbrado tanto a proteger nuestro yo individual, que nos aferramos a los límites defensivos de nuestro ego. Creo que se requiere un deliberado acto de voluntad para disolver los límites de nuestra personalidad y permitir que el Espíritu surja.

    Nunca he conocido a una persona cuya mayor necesidad sea otra cosa que el amor verdadero e incondicional. Se puede encontrar en un simple acto de amabilidad hacia alguien que necesita ayuda. No hay amor equivocado. Lo sientes en tu corazón. Se trata del hilo común de vida, la llama que calienta nuestra alma, da energía a nuestro espíritu y suministra pasión a nuestras vidas. Es nuestra conexión con Dios y con cada uno.
    ~ Elizabeth Kubler-Ross,
The Wheel of Life (Scribner)

Es difícil conocer este tipo de Amor. No lo puedes detectar a través de tus sentidos. Sólo lo conocerás con tu corazón y tu alma. Cuando estoy en la iglesia, en el templo, en ceremonia o en meditación, siento un anhelo, una dolorosa añoranza. No es de naturaleza "religiosa", sino una profunda necesidad en mi alma de conectarme con el Gran Misterio de Dios. La meditación y la oración traen alivio. La pequeñez de mi vida se desvanece en el fondo y, al mismo tiempo, todo parece más claro para mí. Me siento sin límites, libre y plena. Me conecto con Dios.

Espero que tú también hayas experimentado este estado de ser y que llegues a apreciar plenamente la importancia del Amor Divino en tu vida. Todos necesitamos valorar los momentos que nos trae esta comunión y encontrar maneras de poder repetirlos con regularidad. La transformación de conciencia que experimentamos a través de la Unidad creará poderosos cambios en nuestra vida. El sentido de ser "otro que" comienza a desaparecer a medida que sentimos la conexión que compartimos con toda la vida y empezamos a sentir que somos "más que" sólo nosotros mismos. Esta toma de conciencia provoca una nueva conducta y perspectiva. Después de todo ¿Cómo podemos dañar a la Tierra si somos la Tierra? Robar o engañar a nuestro hermano es engañarnos a nosotros mismos. Y por supuesto, cuando afirmamos la vida a través de nuestras acciones, alteramos activamente toda la vida de una manera positiva.

    El pensamiento se manifiesta en la palabra. La palabra se manifiesta como acto. El acto se convierte en hábito. Y el hábito  templa  el carácter. Así que observa el pensamiento y sus formas con cuidado. Y déjalo brotar del Amor que nace de la preocupación por todos los seres.
    ~ Buddha

Con esta lección y con todos los anteriores artículos de AMOR, hemos construido una base sólida sobre la cual podemos pararnos después de quitarnos las capas - pelando la cebolla de uno mismo. Hemos aprendido a reconocer el Amor, experimentamos la gratitud del Amor y valoramos nuestro Amor hacia sí mismos y por los demás. Ahora nos corresponde a cada uno aceptar las cualidades del Amor en nosotros mismos y reconocer el valor de los estados superiores del Amor Espiritual. Nos corresponde explorar el Amor por nuestra propia cuenta.

Por favor, recuerda que el Amor siempre está presente en cada uno de nosotros. El Amor da vida al ser y el ser da vida al Amor. No depende de nadie más. En todas formas y en todo momento, podemos Amar.

Ahora, tu práctica final de nuestra serie AMOR:
Un querido amigo me dijo una vez: "El Amor es la pregunta y el Amor es la respuesta." Medita esta afirmación y explícate por qué eres una perfecta manifestación de Amor.